Hey quiero verte, volar sobre mí.
te TODO, es impresionante lo mucho que dejaste en mí,
no hay día que no vuelvas,
como dulce recuerdo,
como pasado que aprieto con fuerza,
que no quiero que escape.
Como tenias ese disco de bardot, tu forma de caminar,
tu cosas, quiero estar ahí.
Porque te espero,
porque sos el amor instantáneo,
que no olvido, que siempre diré que sí.
After such pleasures
ResponderEliminarEsta noche, buscando tu boca en otra boca,
casi creyéndolo, porque así de ciego es este río
que me tira en mujer y me sumerge entre sus párpados,
qué tristeza nadar al fin hacia la orilla del sopor
sabiendo que el placer es ese esclavo innoble
que acepta las monedas falsas, las circula sonriendo.
Olvidada pureza, cómo quisiera rescatar
ese dolor de Buenos Aires, esa espera sin pausas ni
esperanza.
Solo en mi casa abierta sobre el puerto
otra vez empezar a quererte,
otra vez encontrarte en el café de la mañana
sin que tanta cosa irrenunciable
hubiera sucedido.
Y no tener que acordarme de este olvido que sube
para nada, para borrar del pizarrón tus muñequitos
y no dejarme más que una ventana sin estrellas.
Julio Cortázar.
Escribís maravilloso.