lunes, 15 de agosto de 2011

Néctar

Una melodía zigzagueante y tenebrosa me invade, ¡es eterna! . Los dientes crujiendo de la noche en espera ansiosa de que alguien caiga en su red, donde la hora mágica nunca llegará. Perderte en un laberinto en espiral: de altas enredaderas fantasmagóricas que te van haciendo parte de una. Lentamente suben por mis pies, sentís esa flora viscosa que te lleva más a el centro mismo de este juego siniestro de espejismos, donde se repite lo innombrable, lo que encontré en el centro de la flor negra.

(Y mis sueños asustan mis días, la niña azul llora. Nada es extraño)

miércoles, 10 de agosto de 2011

fotografías

y vos no te reconoces, sólo sentís un vacío inmenso rodeado de dolor.

lunes, 1 de agosto de 2011

En mis noches

Mendiga cariño,
búsqueda incesante por lo inexistente.
Compañía vacía,
encuentro crudo con la ausencia,
que sonríe sin dientes gritando:
¡¡Siempre aquí!!
¡¡Siempre ahí!!
Me señala y se funde en mi pecho
en un respiro descuidado, me congela.

("Hiel, hiel, hiel")

Su eco resuena en mi cuerpo.
Entonces sólo queda decir adiós
o verse en el espejo, demacrada
después del duelo
y comprender que ésta
era una cicatriz antes
del 19 de marzo de 1990.